El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, obsequió este martes a su par argentina, Cristina Fernández, una estatuilla del doctor José Gregorio Hernández, considerado un santo sanador por los venezolanos, luego de que mandataria fuera operada de un hematoma craneal.

“Este es un obsequio que vamos a enviar a nombre de Venezuela a la presidenta argentina. Le enviamos nuestro amor, nuestra oración en este momento a ella y a toda Argentina”, dijo Maduro la iniciar su discurso en el Parlamento, donde pedirá poderes especiales para legislar por decreto.

Fernández, de 60 años, fue operada con éxito este martes para extraerle un hematoma de la cabeza en un sanatorio de Buenos Aires, y “evoluciona favorablemente, permaneciendo internada en la unidad de cuidados intensivos”, según el primer parte médico tras la intervención quirúrgica.

Maduro, vestido con sus impecables insignias presidenciales, exhibió ante el plenario la estatuilla -de unos 30 centímetros- del doctor Hernández, fallecido en 1919 y a quien muchos venezolanos se encomiendan por sus “milagros” para superar problemas de salud.

“Quería pedirle a nuestro santo, el santo del pueblo, José Gregorio Hernández, su protección para la presidenta de argentina, que anda batallando por el restablecimiento por su salud”, agregó Maduro, aliado del gobierno argentino.

Venezuela inició en 1949 el proceso de beatificación y canonización ante el Vaticano tras atribuirle varios milagros. La semana pasada miembros de la Conferencia Episcopal Venezolana acudieron a la Santa Sede para promover ese pedido.