El Reino Unido anuló unas autorizaciones de exportación de equipamiento militar hacia Egipto por temor a que puedan ser usados en contra de los manifestantes, anunció el viernes a la AFP una portavoz del ministerio británico de Comercio.
Las autorizaciones se refieren a componentes de vehículos blindados y de ametralladoras, así como a equipos de radio y de comunicaciones entre otros para tanques, precisó la portavoz.
“Estamos muy preocupados por la situación en Egipto y los acontecimiento que llevaron a la muerte de manifestantes”, declaró en un comunicado el ministro de Comercio, Vince Cable.
“El gobierno se toma muy en serio sus responsabilidades en materia de exportaciones y aplica uno de los controles más rigurosos del mundo a las exportaciones de armas”, añadió.
“Aunque no tengamos ningún informe que establezca el uso de equipamiento británico durante las manifestaciones en Egipto, hemos tomado la decisión de anular cinco autorizaciones”, dijo Cable.
“No vamos a conceder autorizaciones de exportaciones allí donde estimemos que hay riesgo evidente de que estos bienes puedan ser usados para una represión interna o para un conflicto en el seno de un país, o que puedan ser usados de forma bélica en contra de otro país y poner en peligro nuestra seguridad nacional”, insistió.
Un comisión parlamentaria británica llamó el miércoles la atención sobre el hecho de que el país vendía equipamiento militar a prácticamente todos los países que figuran en su propia lista de regímenes sensibles, incluidos Siria e Irán.
En el caso de Egipto, el informe detalla 134 autorizaciones de exportación de material militar por un valor de 59 millones de libras (90 millones de dólares).
Desde el derrocamiento por parte del ejército del presidente Mohamed Mursi el pasado 3 de julio, los enfrentamientos con las fuerzas de seguridad dejaron más de 100 muertos.