Estados Unidos sigue de cerca la evolución de las protestas en Brasil, que llevaron a más de un millón de personas a las calles, llamando este viernes a los manifestantes a mantener la calma.

“Nuestra posición es clara, ya se trate de Brasil u otros países, las manifestaciones pacíficas son la esencia de la democracia”, dijo el portavoz en funciones del departamento de Estado, Patrick Ventrell a los periodistas.

La embajada de Estados Unidos en Brasil emitió sin embargo un comunicado urgiendo a sus ciudadanos a evitar las “protestas y lugares donde se realicen grandes aglomeraciones”.

“Incluso las protestas o eventos con objetivos pacíficos pueden evolucionar hacia confrontaciones y posiblemente escalar hacia la violencia”, advierte el mensaje.

En Rio de Janeiro el jueves la policía antidisturbios disparó gases lacrimógenos y balas de goma, arremetiendo luego contra una multitud, después de que un pequeño grupo lanzara piedras contra los agentes.

Ventrell dijo sin embargo que Estados Unidos no toma posición sobre las reivindicaciones expuestas en las protestas. Los manifestantes piden mejores servicios públicos y critican los cuantiosos fondos destinados al campeonato mundial de fútbol de 2014 y a los Juegos Olímpicos de 2016.

“No creo que estemos en posición de juzgar en un sentido u otro”, dijo Ventrell, agregando que es “el pueblo brasileño el que debe expresar sus preocupaciones”.