Como un pequeño alivio tras la constante actividad laboral o estudiantil, los fines de semana están diseñados para que las personas dediquen el tiempo libre a realizar las tareas que entre el lunes y el viernes suelen postergar.

Las salidas con los amigos, alimentar un hobby o simplemente dormir hasta que los párpados se petrifiquen son las actividades frecuentes en la instancia popularmente conocida como “finde”.

Si bien el ocio es invocado generalmente en estos descansos, existen prácticas que atentan contra el reposo óptimo del individuo y en las que erróneamente solemos caer.

Comer a destajo

Un arma de doble filo es contar con el tiempo suficiente para dedicarse a cocinar algo más que tallarines o arroz. Desequilibrarse con la alimentación el fin de semana incluso es frecuente en las personas que cuidan lo que ingieren y se ejercitan, según un estudio de la Universidad de Washington consignado por el Huffington Post.

Adelantar trabajo

Muchos establecen el fin de semana como un momento para poner la mente en reposo, lo que incluso puede favorecer la productividad al volver a las labores. Pese a ello, algunos no resisten estar alejados de lo que puede ocurrir con el acontecer laboral y buscan estar lo más al día posible.

Lo mejor es reprimir por completo el impulso y permitir que el cerebro se tome unas vacaciones de dos días. Obviamente lo anterior no vale para quienes, por los turnos que se les asignan, deben trabajar el sábado o el domingo.

Conectarse 24/7

Es lo más difícil, en vista del fácil alcance que tenemos a la tecnología. Mantenerse conectado constantemente acarrea una serie de perjuicios para la concentración, para el sueño y además no contribuye a un descanso eficiente. Dejar el smartphone en la casa y disfrutar de una actividad en el exterior es lo más apropiado.

Dormirse demasiado tarde

Un fenómeno similar al “jet lag” es el que presentan quienes regresan a sus actividades habituales el lunes y que no se tomaron el tiempo suficiente para dormir o lo hicieron a una hora mucho más tarde de lo convencional. Lo recomendable es dormir el domingo en un horario apropiado, para evitar que el primer día de la semana sea una tortura.

Éstas, junto con otras prácticas, son las que se deben evitar si se quiere tener un fin de semana pleno. ¿Qué otras actividades nos recomiendas para descansar sin problemas?