El alcalde de Estambul, Kadir Topbas, se mostró dispuesto este sábado a renunciar a algunas partes del proyecto de acondicionamiento de la plaza Taksim, origen de la revuelta contra el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, que ya dura más de una semana.

“No pensamos construir un centro comercial allí ni un hotel ni viviendas”, declaró Topbas ante la prensa, haciendo alusión a la posibilidad de un “museo municipal” o de un “centro de exposiciones”. “Discutiremos todo esto con los arquitectos”, añadió.

Sin embargo, el alcalde confirmó la intención de las autoridades de reconstruir en el parque Gezi el antiguo cuartel otomano destruido en los años 1940.

“El proyecto de reconstrucción de este cuartel formaba parte de nuestras promesas electorales, el pueblo nos dio la autoridad para hacerlo”, explicó Topbas.

“Claro que tenemos defectos, pero podemos resolverlo a través del diálogo”, aseguró.

El proyecto de acondicionamiento de la plaza Taksim prevé la destrucción del parque Gezi y de sus 600 árboles, situado junto a la plaza Taksim, para reconstruir allí un cuartel militar. Las autoridades evocaron la posibilidad de instalar en este cuartel un centro comercial o viviendas.

La violenta intervención de la policía el día 31 de mayo por la mañana para desalojar a los manifestantes que ocupaban el parque provocó enfrentamientos que se transformaron en un amplio movimiento de protesta contra el gobierno islamo-conservador, el más importante desde su llegada al poder en 2002.