Cuando los ojos del mundo estaban fijos en la chimenea de la capilla Sixtina en Roma y apenas salio la tradicional fumata blanca anunciando al nuevo pontífice, el tañir de las campanas comenzó también a llenar el aire de la ciudad puerto.

En la catedral porteña se desarrollaba una misa para los adultos mayores, cuando el sacerdote que oficiaba el servicio anunció la noticia, entregando el primer dato que relaciona al nuevo líder de la Iglesia Católica con Chile.

La alegría de los fieles fue captada por el micrófono de Radio Bío Bío.

El argentino Jorge Mario Bergoglio en 1958 se traslado Santiago donde comenzó el noviciado en la Compañía de Jesús. Cabe destacar que es el primer Papa latinoamericano de la historia, el primer jesuita y el primero llamado Francisco.