El adiestrador argentino del Athletic de Bilbao, Marcelo Bielsa, respondió a las críticas efectuadas por el el vicepresidente del cuadro vasco, José Ángel Corres, que manifestó que “no hay confianza plena” en el trabajo del rosarino.

Lo anterior, a raíz de los malos resultados, que fueron coronados con la derrota en el clásico vasco ante Real Sociedad del pasado fin de semana.

“En esta vida, nadie tiene confianza plena, sobre todo si los resultados no acompañan”, señaló el dirigente al ser cuestionado por si Bielsa podría ver peligrar su cargo.

El segundo al mando del club rojiblanco aseguró que el futuro del técnico argentino depende de los próximos resultados: “Bielsa no ha sido cuestionado en ningún momento, pero evidentemente todos tenemos un crédito que se va a agotando”, añadió.

El ex entrenador de la selección chilena, reaccionó al señalar que “sé que tengo un voto menos cuando la directiva tenga que votar mi continuidad”.

“Yo no deslindo responsabilidades. La realidad del equipo hace que la responsabilidad del entrenador sea mayor. Tenemos necesidades urgentes, máximas e indispensables por ganar. Soy el máximo responsable de lo que está sucediendo… No necesito nada de nadie. Lo que necesito, lo recibo. La confianza en el DT es hasta el segundo previo que recibe el ultimátum. El puesto de entrenador es inestable por naturaleza…”, comentó.

Bielsa también habló de la eficacia goleadora. “Si hay una cosa imposible de relacionar es un sistema con la eficacia goleadorea del equipo. La eficacia no es una condición que se desarrolla, se trabaja u optimiza. El trabajo hace que un equipo genere ocasiones. Nos han metido 50 goles. 15 de ellos de pelota detenida. El rival necesitó 150 ocasiones de gol, de las cuáles se concretaron esas 50”.

El rosarino agregó detalles del trabajo, dejando en claro que no deja nada al azar y que sus estudios del rival son completos.

“Respecto del sistema, yo ya les expliqué que soy el responsable de esto y el culpable. Los jugadores no tienen culpa. De lo defensivo, en los 35 goles restantes, debo observar que hay que cambiar algo. Uno es que hay que poner más jugadores a defender para que nos metan menos goles…”.

Añadió que “mi lectura es algo me da hasta vergüenza decirlo. El sistema defensivo no se soluciona agregando más hombres a defender ni poniendo doble pivot, aunque cuando defendemos es una cantidad altísima y así no se resuelve el problema. la otra lectura es jugadores de algún perfil determinado en esa zona, pero yo considero que se debe respetar algunas normas del fútbol y no es obcecado tratar de mantenerlas. El equipo que puede ganar es el que está en mejores condiciones. El espíritu del equipo es proponer y no puedo ir en contra de lo que pienso, para que el jugador entienda el mensaje y que su autoestima sea alta. El entrenador sólo convence a través de decir lo que piensa y lo que siente. Nosotros no tomamos las decisiones porqué sí. Tenemos 20 puntos menos de los que merecemos”.

Finalmente, asumió que su responsabilidad en cuanto a los resultados es porque el clima en el que el jugador se mueve no ha tenido la tranquilidad necesaria para disponer de sus virtudes a pleno, en donde él deberá mejorar y cambiar.