El jefe de gobierno italiano Mario Monti anunció el martes que renunció a asistir a la cumbre UE-CELAC que tendrá lugar en Santiago el 26 y el 27 de enero durante una reunión en Roma con todos los embajadores de América Latina.

La decisión fue tomada debido a los “compromisos políticos” adquiridos por Monti, quien encabeza una coalición de partidos centristas para las elecciones legislativas del 24 y 25 febrero.

“Considero un gesto muy deferente con América Latina el hecho de que haya venido a la sede del Instituto Italo-Latinoamericano (IILA) a pedir disculpas por su ausencia en la cumbre ante todos los embajadores”, comentó a la AFP el embajador de Colombia, Juan Manuel Prieto.

El jefe de gobierno italiano saliente, quien renunció en noviembre pasado al cargo tras un año de gestión, decidió lanzarse por primera vez al ruedo político pese a no tener experiencia, ya que había sido designado en noviembre del 2011 como técnico para sacar a Italia de la crisis económica y financiera.

“Respeto y admiro, con una punta de envidia, a América Latina”, dijo Monti, economista, al referirse a los altos índices de crecimiento registrados en la mayoría de los países de la región.

“Europa mira con admiración y espíritu de emulación el crecimiento económico que América Latina registró en el último decenio”, reiteró.

“Impresiona el sentimiento de optimismo y de confianza con que América Latina mira su futuro”, dijo tras proponer que Europa y América Latina refuercen la relación económica como “socios naturales” con “interdependencias económicas reales”.

El jefe de gobierno saliente mencionó entre ellos el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre la Unión Europea, Perú y Colombia, y un acuerdo de asociación con Centroamérica.

“Son pasos significativos, que abren muchas perspectivas”, afirmó el ex comisario europeo a la competencia.

Monti elogió de nuevo los logros alcanzados por los países de América Latina que “por caminos muy diferentes, han sabido construir un tipo de desarrollo original que busca combinar crecimiento económico, justicia social, modernización y sostenibilidad del medio ambiente”.

Monti recordó que su padre “nació en Argentina”, país al que se habían trasladados en el siglo XIX los abuelos para abrir una fábrica de cerveza y en donde reside un ramo de la familia.