Rusia envió una nueva flotilla de buques de guerra al Mediterráneo, hacia las costas de Siria, donde el conflicto se agrava, informó este martes el ministerio de Defensa.

El buque patrullero “Iaroslav Mudryi”, los navíos de desembarco “Kaliningrado” y “Alexandre Chabalin”, el remolcador “SB-921″ y el barco nodriza “Lena” zarparon del puerto de Baltisk (mar Báltico) hacia el Mediterráneo, precisó el ministerio, citado por la agencia Itar-Tass.

Según la misma fuente, estos barcos tomarán el relevo de otra flotilla enviada a la zona en noviembre.

El ministerio no precisa si los barcos se dirigen al puerto sirio de Tartus (200 km al noroeste de Damasco), donde Rusia, aliada de Siria desde la época soviética, dispone de una base de reabastecimiento y de apoyo técnico.

Una fuente de la base naval de Baltisk, citada por la agencia Interfax, afirmó que la flotilla iba al Mediterráneo “para participar eventualmente en la evacuación de los ciudadanos rusos” de Siria.

Rusia es uno de los pocos apoyos del régimen sirio, al que le vende armas.