La celebración del Gran Premio de Corea del Sur de Fórmula 1, el pasado mes de octubre, generó unas pérdidas de 36 millones de dólares, anunció el miércoles la organización, lo que provoca incerteza sobre la continuación de esta prueba, que se disputa desde 2010.

La única nota positiva es que las pérdidas en 2012 fueron menores que en 2011 (56 millones de dólares) y, sobre todo, que en 2010 (67 millones de dólares), según las cifras comunicadas por un cargo electo de la provincia de Jeolla del Sur, cuyos contribuyentes locales financian en gran parte el Gran Premio que se disputa en el circuito de Yeongam.

“No es porque las pérdidas hayan sido menos importantes que podamos decir que la carrera de este año haya sido un éxito”, admitió Seo Dong-wook a la agencia de prensa Yonhap. “Vamos a tener que tomar decisiones radicales para cambiar esto en el futuro”, añadió.

Tras la edición de 2011, la organización amenazó con retirar la prueba del calendario de 2012, aunque finalmente obtuvo una renegociación a la baja del contrato con Bernie Ecclestone, patrón de Formula One Manegement, organizadora del campeonato del mundo.