El primer ministro de Egipto Mohamed Mursi aseguró este martes que los derechos de las mujeres y de los no musulmanes en su país están garantizados, durante una conferencia al margen de la Asamblea General de la ONU en Nueva York.

“Todos los egipcios representan a la mayoría, todos los egipcios -hombres, mujeres, musulmanes, cristianos- independientemente de sus creencias, su género, su color”, explicó Mursi en un foro organizado por la Iniciativa Global Clinton.

El presidente egipcio, miembro del movimiento islámico Hermanos Musulmanes y primer mandatario elegido democráticamente tras la caída del régimen de Hosni Mubarak, afirmó que su país será laico y plural.

“Tenemos realmente un nuevo Estado democrático y un nuevo Estado civil en Egipto: no teocrático, no militar”, expresó.

Mursi negó que el auge de los Hermanos Musulmanes ponga en peligro en su país los derechos civiles y religiosos de las minorías, añadiendo que el verdadero problema de Egipto es la corrupción de la era Mubarak.

“No tenemos un problema real en términos de derechos de las mujeres. Sin embargo, la corrupción es algo que todo el mundo padece”, precisó.