Los mellizos Vicente y Benjamín Israel no pudieron alcanzar lugares destacados en esta primera etapa, mientras que Jeremías abandonó por problemas en su moto y se reenganchará para la etapa de mañana.
Las declaraciones de Jeremías Israel de hace un par de días fueron premonitorias al referirse a las pruebas especiales y las exigencias que encontrarían en esta competencia mundial que se convirtió en una verdadera odisea para los pilotos al enfrentarse a dificultades a las cuales no habían conocido anteriormente.
Ese fue un aspecto al que se sumó el orden de salida que perjudicó abiertamente a los mejores pilotos nacionales, los que debieron de largar muy atrás y tuvieron que superar a muchos adversarios y fundamentalmente encontrarse con caminos malos y muchos competidores que se convertían en otro obstáculo.
De todas maneras fue una gran experiencia el intervenir en esta primera fecha del calendario Mundial de Enduro, que en una semana más continuará en Argentina para después dejar nuestro continente.
Jeremías, que el lunes viaja a los Emiratos Arabes para la primera fecha del Campeonato Mundial de Cross Country -en el cual interviene Chaleco López- como un entrenamientos para su participación en el Dakar del 2013. Tras realizar dos buenas especiales se perdió de la ruta, penalizando en cuatro minutos. Pese a ello siguió batallando hasta que en la penúltima especial tuvo que abandonar al quebrarse el pedal del freno. De todas maneras se reintegrará a la etapa de mañana, que es la segunda fecha de este Mundial, ya que entregó su moto a Parque Cerrado.
Vicente comenzó muy bien, luego que fuera el más veloz en la primera especial corrida el viernes, pero paulatinamente se fue encontrando con muchos problemas y especialmente un tramo que era una verdadera muralla que apena se subía y con el paso de las motos la situación se fue agravando. No dudaron en confesar tanto él como su hermano Benjamín para sortearla recibieron el apoyo de los aficionados. De esa manera al igual que muchos pilotos pudieron superar ese enorme escollo que a la postre los hizo perder mucho tiempo, rodar y alejarse de los lugares de vanguardia.
Benjamín realizó una primera parte de la competencia con buenos resultados que le permitían estar entre los “top ten” al igual que Vicente, pero esa pared, que no era para pilotos si no que para andinistas, lo retrasó.