El Parlamento afgano pidió este lunes que los culpables norteamericanos de la matanza de 16 civiles perpetrada el domingo en el sur del país sean juzgados en público en Afganistán.

“Pedimos firmemente que el gobierno norteamericano castigue a los culpables y los juzgue en un proceso público ante el pueblo afgano”, declaró la cámara baja del Parlamento en un comunicado.

El domingo antes del amanecer, un soldado del contingente estadounidense de la fuerza internacional de la OTAN dejó su base en la provincia de Kandahar, fuertemente armado, y mató a los ocupantes de dos casas de aldeas cercanas, entre ellos a nueve niños y tres mujeres, para luego quemar sus cuerpos.

Los talibanes juraron vengar el hecho y prometieron intensificar sus ataques contra los “estadounidenses salvajes y enfermos mentales”.

Estados Unidos prometió una exhaustiva investigación de lo sucedido.

El presidente Barack Obama telefoneó el mismo domingo al presidente afgano, Hamid Karzai, “para expresarle su consternación y tristeza” por la masacre y asegurarle el compromiso de su gobierno para establecer los hechos lo más rápidamente posible y para responsabilizar” a quienes corresponda, dijo la Casa Blanca.