Los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Argentina, Cristina Kirchner, inaugurarán el 30 de junio en Buenos Aires un gasoducto, que elevará el bombeo a 27,7 millones de m3 diarios de gas natural, informó el vicepresidente Alvaro García.
“El presidente Evo va a estar el día 30 en Buenos Aires, va a estar inaugurando con la presidenta Kirchner el gasoducto Juana Azurduy (GIJA) que nos va a permitir exportar mayores volúmenes de gas a la Argentina”, dijo García en rueda de prensa en la ciudad de Santa Cruz (este del país).
La confirmación del encuentro presidencial echa por la borda versiones que sostenían que el acto sería suspendido a causa de una molestia argentina por la reciente visita a Bolivia del ministro de Defensa iraní, Ahmad Vahidi, inculpado por la justicia de ese país por un letal ataque antijudío en 1994.
Ambos mandatarios cumplirán además una nutrida agenda en el marco de un “excelente nivel de cordialidad y confianza mutua” que domina las relaciones bilaterales, añadió García.
El ducto de 48 km, de los cuales 13 km están en territorio boliviano y 35 en territorio del noreste argentino y que será inaugurado con dos años de retraso, permitirá alimentar gradualmente, hasta llegar a 27,7 millones de m3, al Gasoducto Nordeste Argentino (GNEA) desde 2014 por los siguientes 20 años.
Bolivia tiene “un plan de producción y de envío gradual: este año es 7 (millones de m3 diarios, MMCD), el próximo año es 11, en 2012 vamos a pasar a 15 millones y así gradualmente hasta llegar a 27,7″, dijo el titular de la estatal petrolera boliviana YPFB, Carlos Villegas.
Con el aumento de sus exportaciones de gas a Argentina hasta ese nivel, Bolivia se beneficiará con ingresos anuales por unos 2.000 millones de dólares, según estimaciones de YPFB.
Bolivia exporta además al mercado brasileño un promedio de 30 MMCD.
La obra de integración energética -que será inaugurada por los mandatarios- fue acordada en 2006 por el presidente Morales y su entonces colega argentino, el fallecido Néstor Kirchner, pero por varios factores en cada uno de los países sufrió considerables retrasos.
