El primer ministro ruso, Vladimir Putin viajó el jueves a Abjasia para asistir a los funerales del presidente de esta región separatista georgiana, a la que prometió aumentar la ayuda rusa, en un abierto desafío a las autoridades de Tiflis.

Poco antes de llegar a Sujumi, la capital de esta república autoproclamada, Putin depositó una corona de rosas sobre el féretro de Serguei Bagapch y rindió homenaje al fallecido presidente.

En agosto de 2008, Rusia reconoció la independencia de Abjasia y de Osetia del Sur, otro territorio separatista georgiano pro-ruso, después de una breve guerra con Georgia por el control de esta última.

Después de asistir a la ceremonia fúnebre, Putin se reunión con el primer ministro abjaso, Serguei Chamba, y prometió una ayuda financiera de Moscú.

Putin y el presidente ruso, Dmitri Medvedev viajaron a Abjasia después de la guerra de agosto de 2008, provocando protestas de Tiflis y críticas occidentales.

Una visita del ministro ruso de Relaciones Exteriores Serguei Lavrov, en abril pasado, provocó la críticas de Estados Unidos y de la Unión europea, que no reconocen la independencia de Abjasia y de Osetia del Sur.

Además de Rusia, sólo Venezuela, Nicaragua, la pequeña isla de Nuru y Vanuatu, han reconocido la independencia de Abjasia y De Osetia del Sur.