La Cámara del Crimen (apelaciones) de Buenos Aires confirmó el encausamiento con prisión preventiva de siete acusados por el crimen de un militante de izquierda durante una protesta gremial el 20 de octubre, que conmovió a los argentinos, dijo el martes una fuente judicial.
Mariano Fereyra, un militante del Partido Obrero (PO, trotskista) de 23 años, murió al recibir un disparo en el tórax cuando participaba de una movilización de unos 200 trabajadores ferroviarios contratados (fuera de planta) el pasado 20 de octubre que fue atacada por activistas del sindicato Unión Ferroviaria, adherida a la peronista CGT.
Los integrantes de la Cámara del Crimen calificaron al episodio de “plan criminal” y rechazaron el argumento de la defensa que pretendía que se lo considere como “homicidio en riña”, lo que hubiera bajado de 25 a ocho años de prisión la posible sanción penal.
Dos de los siete detenidos, Cristian Favale y Gabriel Sánchez, están sindicados de haber hecho los disparos, mientras que Pablo Díaz, dirigente de Unión Ferroviaria, está imputado como instigador, informó el Centro de Información Judicial.
La Cámara consideró además que deben seguir encausados también por “intento de terminar con la vida de Elsa Rodríguez Sosa, Nelson Aguirre y Ariel Pintos”, otros tres miembros del PO que fueron heridos por armas de fuego, la primera de los cuales, una mujer de 60 años, de gravedad.
La semana pasada, otra protesta realizada por trabajadores ferroviarios contratados que reclaman ser efectivizados, con el respaldo del Partido Obrero, interrumpió durante siete horas las vías de la línea Roca de ferrocarril, que une Buenos Aires con la poblada periferia sur, en un episodio que terminó con saqueos de comercios y actos de vandalismo en la estación Constitución.
El gobierno denunció penalmente al PO y el ministro de Justicia, Ricardo Alak, lo acusó de “querer la desestabilización de la Argentina”, al igual que “sectores de derecha”.
