El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, reiteró el lunes que “todos” los presos políticos en Cuba serán liberados en un periodo de 4 meses o “incluso antes”, si bien reconoció que todavía no se ha fijado cuántos opositores siguen entre rejas.

“Todos los presos de conciencia serán liberados, de aquí a 4 meses e incluso será antes”, aseguró Moratinos tras una reunión en Bruselas con sus homólogos europeos a quienes expuso la situación actual en la isla tras el inicio del proceso de excarcelación, fruto de un diálogo entre La Habana y la Iglesia católica.

No obstante, el ministro admitió que todavía debe definirse “quién es preso político en Cuba”: “Vamos a ponernos de acuerdo quiénes son” y “todos serán liberados”, dijo.

El diálogo entre el régimen castrista y la Iglesia católica, apoyado por España, permitió anunciar a principios de mes la excarcelación de los últimos 52 disidentes detenidos del grupo de 75 que fue condenado en 2003.

Pero tanto el líder del Parlamento cubano, Ricardo Alarcón, como Moratinos señalaron en los últimos días que las liberaciones podrían extenderse a todos los opositores que siguen encarcelados.

Ante sus homólogos europeos, Moratinos expuso los “resultados positivos de los esfuerzos españoles” en Cuba: “He cumplido la parte de mi mandato (…) Me dieron un tiempo de margen y confianza para ver” si se daban progresos en Cuba y “así ha sido el caso”.

El ministro se refería al plazo que de forma informal le concedieron sus homólogos europeos en junio antes de decidir si renovaban la Posición Común de la UE con Cuba, que condiciona las relaciones con la isla a avances en derechos humanos.

Moratinos mostró su “confianza” en que, a la luz del reciente proceso de excarcelación, el resto de países de la UE apoye la voluntad de España de eliminar el próximo septiembre ese documento de 1996 para establecer en su lugar “una nueva relación” con La Habana.

Interrogado sobre el hecho de que varios de los excarcelados políticos que fueron acogidos este mes por España pidieran a la UE que no levante la Posición Común, el ministro afirmó que “son libres” y que está “encantado” de que se “manifiesten políticamente”.

“Gracias” a que España no les acoge como refugiados políticos, “pueden criticar al ministro Moratinos, pueden pedir no cambiar la Posición Común (…) esa es la gran ventaja”, dijo.