20 millones de pesos le costará al Conservador de Bienes Raíces de Temuco la libertad de su hijo, encarcelado por un homicidio ocurrido en las afueras de un pub de la capital regional, tras fijar la justicia dicho monto por concepto del mal causado a la madre de la víctima.
La sentencia de la Corte Suprema, si bien anula la del Tribunal Oral de Temuco, no cambia el fondo del asunto, de que Roberto Hadi es autor del homicidio de Aimer Carrillo.
La sentencia de reemplazo acogió sólo una de las causales de nulidad, que consiste en la reparación celosa del mal causado. Si bien es cierto, que la sentencia de remplazo rebaja la pena y el beneficio de la libertad vigilada, dispuso que ello es efectivo sólo cumpliendo todos los demás requisitos que señala la ley.
En ese sentido, el abogado querellante Alejandro Herrera, dijo que para que el acusado acceda a estos beneficios, deberá satisfacer la indemnización civil, costas y multas.
Esto significa que mientras Hadi no complete el pago de la indemnización civil, es decir, de $20.000.000 más las costas de la causa que determine el Tribunal de Temuco, no podrá salir de la cárcel y gozar del beneficio que le fuera concedido.
Mientras, la familia de Aimer Carrillo piensa que la Corte Suprema ha ratificado que hubo un homicidio, que la defensa del condenado no pudo probar que obró en legítima defensa y que al establecer el beneficio de la libertad vigilada, lo hace condicionado a que se pague el monto fijado como indemnización civil.
Con ello -indicaron- se ha hecho una justicia efectiva ya que se ratifica la calificación del hecho delictual y se impone la exigencia de pagar el monto indicado a la madre de la víctima, cuestión que con la condena del Tribunal Oral de Temuco no era viable.
