El Banco Central decidió mantener la tasa de interés en 0,50%, su nivel mínimo histórico, y continuar aplicando las medidas complementarias adoptadas en la reunión anterior.
Según el comunicado del instituto emisor, en el exterior, los datos recientes muestran una estabilización de las perspectivas de crecimiento global para este año. Y en el plano interno, la información disponible para el segundo semestre de este año indica que el debilitamiento de la actividad se habría detenido. Aunque el desempleo sigue aumentando, la ocupación ha tendido a estabilizarse.
Ante esta información, los economistas coinciden en que es la mejor decisión que se pudo tomar, y recomiendan esperar a que el ciclo económico fluya para conocer los efectos de las medidas.
Al respecto, el economista de la Universidad Central, Rafael Garay, dijo a Radio Bío-Bío que la gran duda está detrás del traspaso que los bancos hacen de la tasa de interés a los usuarios, y no en otras medidas adicionales de política monetaria.
Un argumento con el que coincidió el economista de la Universidad San Sebastián, Erik Haindl, quien comentó que la economía estadounidense debiera estar por tocar fondo, razón por la cual, el efecto en nuestro país debiera estar acotado.
El Banco Central informó que la tasa se mantendrá en 0,50% por un tiempo prolongado, y continuará usando sus políticas con flexibilidad.