La Fiscalía Local de Valparaíso informó este jueves respecto del incendio ocurrido el 2 de agosto de 2013 en la Iglesia San Francisco del Cerro Barón de la ciudad puerto, que no hubo actos dolosos o intencionales, es decir, no fue un hecho delictual, por lo que sobreseyó el caso.

Con menos de un año de investigación, la Fiscalía de Valparaíso aclaró que “no hubo actos dolosos o intencionales tras el incendio que destruyó la Iglesia San Francisco, lo cual fue establecido gracias a un completo informe evacuado por el Laboratorio de Carabineros (Labocar), que determinó que el fuego se inició en el recalentamiento de una parrilla encendida por alumnos al interior de dependencias de la Universidad Católica, contiguas al templo”.

Según la Fiscalía, “el trabajo policial tomó largo tiempo no sólo porque el Labocar está abocado a muchas otras causas penales, sino también por la complejidad de la causa puesto que debieron efectuarse pericias referidas a materiales combustibles o acelerantes, con el apoyo de Bomberos”.

El fiscal del caso, Ulises Meneses, explicó que “la investigación del hecho estuvo desde un principio orientada a establecer si tras el incendio había o no responsabilidades penales que debieran ser perseguidas por la Fiscalía.

En materia de incendios, el Código Penal sólo castiga conductas dolosas, no culposas. El peritaje evacuado por Carabineros concluyó, en términos claros y precisos, que no hubo intención de provocar el incendio, lo que se vio corroborado y complementado, además, con las declaraciones incorporadas en la investigación. Por lo anterior, se estableció que no existen responsabilidades penales que perseguir por el hecho, y por ello el tribunal de garantía sobreseyó el caso”.