Una orden de detención contra Natalia Guerra, despachó el Tribunal de Garantía de Quilpué luego que la madre del lactante, que fue “quemado vivo” en noviembre del 2012 en el marco de la denominada “Secta de Colliguay”, cumpliera siete meses en condición de fuga.

De esta organización secreta, liderada por Ramón Castillo Gaete, quien se hacía llamar “Antares de la luz”, un total de 7 involucrados fueron formalizados y acusados de homicidio calificado, excepto Guerra, a quien se le hicieron cargos por parricidio.

Esta orden pendiente, que se extendió a todo el territorio nacional, se da luego de que en abril quedara ejecutoriada la sentencia conforme a la que se condenaba a Guerra y a Pablo Undurraga a 5 años de prisión efectiva.

Undurraga, se presentó a cumplir la pena bajo régimen de encierro en el Centro de Alta Seguridad “Capitán Yaber”, según explicó su abogado Javier Arévalo, quien confirmó que la madre del lactante se mantiene prófuga tras no presentarse a ningún penal del país y haberse fugado del arresto domiciliario que cumplía en su casa ubicada en San Juan de Pirque, en la capital.

De extenderse, esta condición podría implicar la “prescripción” de la orden, según indicó el abogado.

Desde Gendarmería no se entregaron declaraciones por este tema al considerar no tener injerencia en el mismo, mientras que el último informe emitido por la Policía de Investigaciones, dio cuenta de que no registra salidas recientes del país, ni tampoco avances en las entrevistas efectuadas a sus familiares cercanos.