Fue la reina de las comedias románticas de los años 90 y una de las celebridades más queridas de Hollywood, sin embargo, la carrera de Meg Ryan está lejos de ser lo que alguna vez fue.
Pero no sólo su estatus en la industria cambió, sino que también su rostro. Las múltiples operaciones estéticas a las que se ha sometido transformaron su cara dejándola casi irreconocible.
De hecho, el domingo en la noche reapareció en la entrega de los premios Tony, dejando impactados a los usuarios de redes sociales con su nuevo rostro.
Fue tanta la sorpresa, que su nombre se convirtió en uno de los temas más comentados a nivel mundial en Twitter, eclipsando incluso la masacre de Orlando que enlutaba a EE.UU. y el mundo.
Con el paso de los minutos, los comentarios comenzaron hacerse más agresivos y ofensivos, de hecho, la actriz de 54 años incluso fue comparada con el Guasón de Batman, algo que ciertamente ya no le hace gracia a Ryan.
Hace algún confesó en una entrevista con la revista Porter, que le molestan los constantes comentarios acerca de sus cirugías plásticas, e incluso señaló que le gusta el proceso de envejecimiento que vive. “Estamos atascados en estas conversaciones acerca del look y el color del cabello”, dijo. “Es interesante y divertido por cinco minutos. Pero en realidad, no es tan interesante“, agregó.
“Me encanta mi edad. Me encanta mi vida en este momento. Me encanta la persona que me he convertido y en la que he evolucionado“, finalizó.
