Sobre 800 familias aún permanecen sin suministro eléctrico tras la interrupción del servicio originado por la caída de ramas y árboles, dado el fuerte viento y lluvia que afectó la zona sur del país. La situación ha causado molestia, entre quienes se ven afectados por la suspensión de labores de lechería especialmente.

Ayer la empresa eléctrica Saesa, confirmaba que al menos 2.300 clientes estaban afectados por la interrupción de la electricidad, tras lo cual se iniciaría el proceso de reconexión que se cumplió con dificultades en un alto porcentaje, quedando pendientes aún sectores rurales de alta disgregación geográfica pertenecientes a las comunas de Purranque, Río Negro, Puyehue y San Juan de la Costa.

Ricardo Zamora, gerente zonal de Saesa, cifraba en más de 800 las familias que aún no pueden contar con suministro en la zona.

Al tratarse de varias horas sin suministro eléctrico, vecinos de distintas localidades plantearon sus reparos por las consecuencias de la suspensión. Tal es el caso de Rosa Hernández, residente en el sector La Capilla, en el kilómetro 30 de la ruta a Puyehue.

La prolongación del corte de energía eléctrica, también se reflejó por el llamado realizado desde el sector Los Hualles en San Juan de la costa, donde la auditora de Radio Bío Bío, María Eligoro, también se sumaba al descontento que les provoca no tener un servicio básico, aún cuando en su caso se trata de una situación de mas larga data.

Ante el llamado de atención, el ejecutivo de Saesa se disculpó por el retraso a la espera de las faenas que anteceden a la restitución del servicio.

Se espera que con el correr de las horas se normalice el servicio eléctrico, interrumpido a causa del factor climático en medio de una estación que promete nuevas contingencias de lluvia y viento.