El ministro de Transportes y Telecomunicaciones, Andrés Gómez-Lobo, se manifestó tranquilo y confiado ante la posible acusación constitucional que estarían evaluando parlamentarios de la UDI por las recientes fallas en el transporte público de la región Metropolitana.

El secretario de Estado consideró que toda instancia es buena “para explicar lo que sucede con el transporte público, no sólo en Santiago, sino también en regiones”, y dar a conocer los avances de su cartera, según dijo.

Los diputados gremialistas estarían aún estudiando la posibilidad de adoptar la medida fiscalizadora en contra del ministro, acusándolo de incumplir la ley frente a los graves problemas del transporte público capitalino, principalmente por las reiteradas fallas del Metro de Santiago.

Gómez-Lobo afirmó que la acusación es una facultad que tienen los parlamentarios y a su juicio es una buena oportunidad para dialogar en torno sobre los asuntos de su administración.

Presión al oficialismo

Si bien la presentación del libelo acusatorio podría fracasar por la mayoría oficialista en la Cámara de Diputados, los parlamentarios gremialistas esperan que la sola presentación del cuerpo legal obligaría al oficialismo defender al ministro e impulsar mejoras en la gestión de transportes.

“Estamos estudiando cómo hacer exigible al ministro el cumplimiento de sus deberes, ya que estamos frente a una extrema negligencia del Gobierno ante la provisión del servicio de transporte público”, explicó el diputado José Antonio Kast al diario La Tercera.

Los congresistas opositores también apuntarían a generar posibles roces al interior de la Nueva Mayoría, considerando los rumores de cambio de gabinete y las críticas que ya había deslizado la Democracia Cristiana por las fallas del Metro.