Satya Nadella, designado el martes director general de Microsoft tras 22 años en diversas áreas de la empresa, tiene un gran desafío por delante según los analistas: renovar la confianza del mundo en este histórico gigante de la tecnología.

Este ingeniero de origen indio de 46 años, especializado en los servicios de computación en la nube de Internet (“cloud computing”), tiene las habilidades y los recursos necesarios para hacerlo, aseguraron especialistas a la AFP.

“El primer paso para sacar a una compañía del bache es hacer que las personas crean”, explicó el analista de Silicon Valley Rob Enderle, para quien Nadella tiene como desafío “reparar la imagen de Microsoft”.

“Las personas tienen que ver a la compañía como una estrella en ascenso y no como una firma heredada que ya pasó de moda”, opinó.

Microsoft construyó su imperio gracias a software como el sistema operativo Windows y la suite Office, comercializados en forma de licencias para los fabricantes de computadoras o en paquetes para instalar en los ordenadores de hogar u oficina.

Sin embargo, las PC personales sufren ahora los embates de los teléfonos inteligentes y las tabletas, donde el dominio lo tienen Apple y Android, el sistema operativo de Google usado por varios fabricantes como Samsung. Las computadoras también tienen que enfrentarse a una nueva ola que ya está llegando al mercado, la de la tecnología “para llevar puesta”, como las gafas conectadas a Internet de Google.

Apple y Android lograron posicionarse en el mercado gracias a “ecosistemas” amigables a los usuarios de servicios y contenidos digitales adaptados a los dispositivos móviles.

Los intentos de Microsoft de adentrarse en el mundo de los smartphones y las tabletas no fueron del todo exitosos, aunque la compañía lanzó aparatos que los analistas evaluaron de manera positiva y los equipó con software sofisticado.

Microsoft renovó especialmente su sistema Windows para adaptarlo a las pantallas táctiles, pero las ventas de la nueva versión fueron decepcionantes.

En una conferencia por Internet, Nadella -que estudió ingeniería en India y luego informática y administración de empresas en Estados Unidos- anunció que se propone enfocarse en la innovación en áreas donde Microsoft tiene fortalezas únicas que no pueden ser replicadas por sus rivales.

¿Apuesta por las empresas?

La elección de Nadella como director general parece indicar que la junta de Microsoft ve el futuro de la compañía en la computación en la nube y en los servicios para las empresas, dos áreas donde este ejecutivo tiene gran experiencia.

Además de promover el uso de sus populares programas “en la nube”, Microsoft podría ofrecer otros servicios a las empresas, por ejemplo en el ámbito de la seguridad de la información.

En la conferencia por Internet, Nadella mencionó la posibilidad de trabajar con las empresas para ayudarlas a mantener sus sistemas seguros, en el contexto de un uso cada vez más extendido de los smartphones y las tabletas tanto en el trabajo como en los hogares.

El analista Tim Bajarin, de Creative Strategies, que ha seguido el desarrollo de Microsoft por más de tres décadas, propuso en una publicación en techpinions.com su plan para una mejora de la compañía.

Bajarin piensa que lo mejor es dividirla en tres partes: una dedicada a las empresas y los servicios “en la nube”, otra vinculada a los dispositivos móviles y una tercera para entretenimiento y juegos para las consolas Xbox, el único verdadero éxito de Microsoft en términos de equipos.

Creando divisiones específicas, la empresa tendría más posibilidades de competir contra Apple, Google y Samsung, según Bajarin. “Si no hacen algo drástico en este sentido, todo el negocio de Microsoft continuará decayendo”, dijo.

Otro de los desafíos que enfrenta Nadella es evitar que los ingresos caigan durante la inevitable transición de la venta de software, su fuente histórica de ganancias, a las suscripciones a los servicios en la nube.

“Hay una sola una cosa que pueden hacer, y es liderar”, dijo el analista Merv Adrian. “Hay una impresión de que se han quedado rezagados” y el desafío de Nadella es “revertir eso en la percepción y en la acción”.

En su primera charla con los empleados de la empresa tras ser designado, Nadella no dudó en parafrasear a Oscar Wilde para dar su visión sobre el futuro de Microsoft: “Necesitamos creer en lo imposible y anular lo improbable”.