Colombianos residentes en Puerto Montt presentarán una querella por la muerte en el Hospital Base de un mujer originaria de ese país, la que esperó más de diez horas por atención. En este caso buscarán que se aplique la “Ley Zamudio” por una eventual negación de servicio y discriminación. En tanto, desde el recinto asistencial aseguran que se le brindaron todos los cuidados para salvarle la vida.

María Inés Valverde Álvarez, colombiana de 51 años con más de una década de residencia en nuestro país y madre de cuatro hijos, llegó por sus propios medios el 12 de agosto a las 17:00 horas hasta la sala de urgencia del Hospital Base.

La mujer sufrió un desmayo en su trabajo manifestando fuertes dolores de cabeza, nauseas, vómitos y la sensación de pérdida de sensibilidad en sus extremidades. La enfermera de turno sólo le habría tomado la presión, señalándose que debía esperar porque no se trataba de un asunto grave.

Recién a la medianoche y tras largas súplicas se le aplicó suero y a las 04:00 horas ingresó a rayos para practicarle un scanner. A las 08:00 horas ingresó de urgencia a pabellón producto de una eventual aneurisma o derrame cerebral. Tras ello quedó en coma, falleciendo el jueves.

Isalna Cruz, una de las acompañantes, manifestó que fueron humillados y discriminados por el personal del Hospital “por ser negros”. Acusan que, incluso, varias veces se les insinúo que la condición de la mujer era por no haber ingerido drogas, lo que provocó la airada reacción de los visitantes y la posterior intervención de Carabineros.

Por otra parte, Disney Riascos exige que la dirección del Hospital aclare los procedimientos que se le realizaron a su compatriota. Sostiene que si se hubiera actuado a tiempo se le podría haber salvado la vida, y no quedarse con el prejuicio de que, por ser colombiana, era una consumidora de drogas.

La acción legal buscará que el recinto asistencial fundamente el protocolo aplicado en base al artículo 2 de la Ley Antidiscriminación.

Desde el Hospital de Puerto Montt se señaló que si bien no existe un reclamo formal respecto a este caso en la Oirs del recinto o del Servicio de Salud del Reloncaví y tampoco una notificación legal, respondió que la paciente fue categorizada de acuerdo al protocolo de atención establecido, quedando en observación.

Añade que debido a la evolución se le realizaron exámenes y evaluaciones neurológicas, para luego ser derivada e intervenida en pabellón por el diagnóstico de ruptura de aneurisma cerebral. El cuerpo de la malograda fue repatriado a Colombia.