Los 24 pilotos de Fórmula 1 realizaron un total de 1.139 adelantamientos en los 20 Grandes Premios de la temporada 2012 y se detuvieron 957 veces en boxes, sobre todo para cambiar de neumáticos, según las estadísticas difundidas este martes por la empresa Pirelli.

El fabricante italiano de neumáticos, suministrador exclusivo de la Fórmula 1, disponía esta temporada de un banco de datos muy sofisticado, que los podían consultar en tiempo real por las 12 escuderías participantes en el campeonato.

Entre las informaciones registradas en 2012, destaca que la carrera con menos adelantamientos fue el Gran Premio de Mónaco, con sólo 12 y la disputada en Interlagos fue la que más adelantamientos registró, con 147, en una carrera, la última de la temporada, perturbada por la lluvia.

El récord en una pista seca lo ostenta China, con 90 adelantamientos, en una carrera ganada por el alemán Nico Rosberg (Mercedes).

De las 957 paradas en boxes, la gran mayoría fueron para cambiar neumáticos y 16 fueron provocadas como consecuencia de sanciones por incidentes en carrera: 14 ‘Drive Through’, en la que el piloto debe pasar por boxes pero sin parar, y dos “Stop and Go”, con una parada obligatoria de 10 o 20 segundos.

La media fue de 47,9 paradas en boxes por carrera, es decir, 1,9 por piloto. El Gran Premio de Malasia, que también quedó afectado por la lluvia, registró 76 paradas en boxes (tres por piloto), mientras que la cifra más baja se dio en el nuevo circuito de Austin (Estados Unidos), con 24 paradas (una por piloto).

El piloto que realizó la parada más rápida fue el inglés Jenson Button, que en el Gran Premio de Alemania empleó apenas 2,31 segundos.

Pirelli también anunció que en 2012 se utilizaron 31.800 neumáticos de carrera, de ellos 22.500 para pita seca y 9.300 para mojada. Además se usaron otros 6.600 neumáticos en sesiones de entrenamientos organizadas al margen de las carreras.

Los neumáticos para suelo seco realizaron una media de 180 km por juego de gomas, con una velocidad máxima alcanzada de 346 km/h (en Monza en septiembre), contra los 140 km realizados por juego de neumáticos de lluvia, más blandos.