Con el lugar 18 y un futuro prometedor, dada su juventud pues fue el competidor de menor edad en estos Juegos con 19 años; Esteban Bustos con 1.65 metro de estatura y 60 kilos cerró la participación nacional, y se alza como Top 20.

En sus sus primeros Olímpicos el deportista superó por lejos sus objetivos de mejorar el lugar 27 de su hermano Cristián Bustos en Beijing 2008 y consiguió la tercera mejor ubicación del pentatlón criollo en una cita de cinco anillos luego del séptimo casillero del equipo que en Melbourne ’56 integraran Nilo Floody, Hernán Fuentes y Luis Carmona y del noveno casillero del mismo Floody en Londres ’48.

Fue la séptima presentación del pentatlón moderno criollo en unos Juegos Olímpicos y evidenció el surgimiento de una nueva figura para Chile, pues de hecho Esteban fue el único sudamericano que logró clasificar a Londres 2012 con su medalla de bronce en los Panamericanos Guadalajara 2011.

Esteban Bustos cerró la acción de esta tarde con el décimo lugar en la combinada tiro-carrera, su evento más fuerte, sumando 2.448 unidades. Previamente, el pentatleta más joven entre los 36 competidores en estos Juegos había sido el décimo mejor equitador sumando 1.160 puntos.

Antes había logrado 760 unidades en la esgrima y 1.236 en los 200 metros de natación. Todo ello lo alzó con un acumulado de 5.604 unidades: una sumatoria muy importante porque en el rango de los 5.600 se ubicaron los casillero 11 a 18, de manera que con un poco de mejoría en la esgrima, su especialidad más débil, el chileno puede pensar en lugares de mayor envergadura en el concierto global.

Como indicó el pupilo del ex pentatleta y seleccionado olímpico para Seúl ’88, el DT Gerardo Cortés, “habríamos estado contentísimos quedando entre los primeros 20. Gracias a Dios lo logramos. Contento, emocionado, feliz, todo el sacrificio valió la pena. Digamos que en esgrima me pasó la cuenta por ser chico, porque se necesita alcance y eso es lo que más tengo que trabajar”.

“En adelante pensamos sacar un poco más de cuerpo, pero como mi entrenador veía que íbamos bien, mejorando todo, no quiso meter mano, pero ahora ese es el plan; equitación me conviene ser chiquitito arriba del caballo; y correr, con el físico que tengo soy liviano y saco provecho”, señaló.

Finalmente, agregó “siempre esperamos estar entre los primeros 20, pero lo guardamos entre nosotros porque sabíamos que era una meta difícil y si lo decíamos era muy probable que no lo lográramos, y guardamos silencio, trabajamos duro no más, la primera meta era superar el puesto de Cristián que ya era muy bueno porque el nivel aquí es el de los mejores del mundo. Lo trabajamos y gracias a Dios salió. Siempre decía que iba a estar con los mejores del mundo compitiendo y ahora me siento uno de ellos’’.