Los campesinos quechuas protestaron este viernes por segundo día consecutivo en La Paz exigiendo la expulsión de una empresa minera, filial de la canadiense South American Silver, que proyecta explotar estaño e indio en un yacimiento del suroeste de Bolivia.

Los campesinos, muchos de ellos dedicados a la minería informal, se enfrentaron con policías que resguardaban la casa de Gobierno, adonde intentaban ingresar para manifestar.

La policía informó que nueve uniformados resultaron con contusiones.

Los enfrentamientos, que cesaron pasado el mediodía local, ocurrieron pese a la apertura de negociaciones, en las que el ministro de Minería, Mario Virreira, dijo que “previo acuerdo con los ‘ayllus’ (poblados) colindantes” el Estado podría rescindir la concesión del yacimiento minero.

Pero el ministro precisó que la mayoría de las poblaciones del lugar quieren que la empresa continúe con sus tareas de exploración.

El principal dirigente de la Federación de Ayllus (tierras indígenas) del norte de Potosí (suroeste), Damián Colque, dijo que “las negociaciones están rotas” debido a que ellos mismos quieren realizar la explotación del mineral.

Aunque los campesinos dicen oponerse a la explotación de plata e indio -utilizado como semiconductor y en pantallas de cristal líquido- porque temen que cause daños ambientales en su región, muchos de ellos ya hacen operaciones mineras y, con uso de mercurio, contaminan las aguas del lugar, según Virreira.

Los campesinos llegaron a La Paz tras caminar durante diez días desde el poblado de Mallku Khota, en tanto otros pobladores ya se encontraban desde hace días en la ciudad pidiendo exactamente lo contrario, que la firma canadiense comience las operaciones de exploración de minerales.

La filial canadiense tiene una concesión en el departamento andino de Potosí, en el suroeste de Bolivia, donde estima que existen entre 140 millones y 230 millones de onzas de plata y entre 935 toneladas y 1.480 toneladas de indio.

La empresa, que opera en la zona desde 2007, dijo que tiene planeado invertir hasta 2014 unos 50 millones de dólares para concluir la fase de exploración y de estudios previos para la explotación de los dos minerales.