Tres casas editoriales alcanzaron un acuerdo el miércoles con las autoridades de libre competencia en Estados Unidos, después de que el Departamento de Justicia las demandara junto a Apple y a otras dos firmas por conspirar “para elevar los precios de los libros electrónicos”.

Hachette (Lagardere Publishing, Francia), Simon & Schuster (CBS Corp., Estados Unidos) y Harper Collins subsidiaria estadounidense de News Corp, alcanzaron un acuerdo con las autoridades, pero el caso sigue contra el grupo informático Apple y las editoriales, Macmillan (Verlagsgruppe Georg von Holtzbrinck, Alemania) y Penguin (Pearson Group, Gran Bretaña).

El fiscal general, Eric Holder, anunció que el acuerdo con las tres firmas, que aún debe ser convalidado por la Justicia, los compromete a “permitir a los distribuidores de libros como Amazon y (el estadounidense) Barnes & Noble, la libertad de rebajar los precios de sus libros electrónicos”.

Al anunciar la demanda, el departamento aseguró que la conspiración incluyó “esquemas para limitar a Amazon las posibilidades de ofrecer rebajas en los libros electrónicos”, en perjuicio de sus clientes.

El acuerdo tendría como objetivo combatir la política de bajos precios del gigante estadounidense de distribución en línea Amazon y su resultado fue que “los usarios de libros electrónicos pagaron decenas de millones de dólares de más” en sus compras.

Según el texto, las casas editoriales “compartían el objetivo con Apple de limitar la competencia de precios en ventas al público de libros electrónicos”.

Las seis empresas enfrentan otro proceso en Europa, donde las autoridades de libre competencia abrieron en diciembre una investigación ante sospechas de que habrían alcanzado “acuerdos ilegales o se dedicaron a prácticas que tienen por objeto o por efecto restringir la competencia”.