Doce personas murieron y otras tantas resultaron heridas en la explosión el lunes de dos coches bomba en sendas ciudades de Irak, anunciaron fuentes de seguridad y médicas.

El primero explotó a las en Bortolla, 30 km al este de Mosul (350 km al norte de Bagdad), en un campamento que alberga a desplazados de la minoría shabak, secta esotérica minoritaria surgida del chiismo, según un oficial del ejército y un médico del hospital de Mosul.

El balance fue revisado a la baja a 8 muertos y 4 heridos, según Behnam Khales, médico en el hospital general de Mosul. Mujeres y niños figuran entre las víctimas.

La comunidad shabak, que cuenta con unos 30.000 miembros, fue perseguida en tiempos del presidente Saddam Hussein, y varias veces objetivo de Al Qaida tras la caída del dictador en 2003.

Más tarde otro coche bomba explotó en un barrio industrial en el sur de la ciudad de Hilla (95 km al sur de Bagdad), según un comandante de policía. Causó 4 muertos y 13 heridos, según Adil El Chamari, médico en el hospital de Hilla.

Estos atentados son los últimos de una larga serie desde la salida de las tropas estadounidenses de Irak el 18 de diciembre pasado.