La Comisión Europea anunció este lunes su intención de proponer “compensaciones” financieras para los productores de hortalizas afectados por la caída de los precios tras la epidemia de la bacteria E.coli en Alemania.

“Mañana (martes) habrá una reunión extraordinaria de ministros de Agricultura” en Luxemburgo “en la que la Comisión Europea propondrá medidas concretas de compensación” para el sector, dijo su portavoz, Pia Ahrenkilde, en rueda de prensa.

Varios países reclaman ayudas, entre ellos España, víctima de una crisis de desconfianza especialmente contra sus pepinos, que fueron declarados sospechosos por las autoridades alemanas de originar la expansión de la bacteria.

También Francia, Holanda, Bélgica o la propia Alemania reclaman ayudas.

Pero el ejecutivo europeo no pudo de momento fijar un monto para hacer frente a esas compensaciones.

“La idea es llegar mañana (a la reunión de Luxemburgo) con algo que nos permita debatir, y que cubrirá no solamente a los productores que son miembros de organizaciones profesionales, sino también a los que no forman parte de ellas”, precisó el portavoz de la Comisión para los asuntos agrícolas, Roger Waite.

Otra opción es que la Unión Europea autorice a los diferentes gobiernos europeos a conceder ayudas públicas nacionales a los productores afectados, al margen del presupuesto de la UE, pero limitadas a 7.500 euros por explotación, y durante tres años.