La búsqueda de cadáveres en fosas clandestinas continuó este lunes en la ciudad mexicana de Durango (norte), donde han sido extraidos 218 cuerpos desde el 11 de abril, informó Juan Rosales, subsecretario de Seguridad Pública del estado de Durango.

El funcionario se negó a dar detalles del avance de las investigaciones aunque admitió que “hay más de una persona detenida”, sin precisar el número.

Hasta el momento las autoridades no han atribuido esos crímenes a un grupo específico. “Se trata del crimen organizado”, se limitó a responder Rosales.

El funcionario explicó que las autoridades ampliarán la búsqueda de fosas clandestinas a otros municipios del estado, particularmente en las represas, donde algunas versiones señalan han sido arrojados cadáveres.

Las prensa local ha dado a conocer que el hallazgo de las fosas empezó luego de la detención el 30 de marzo de Bernabé Monje Silva, alias ‘El M-14′, quien según estos reportes sería uno de los jefes de la banda local los ‘Ms’, vinculada a Ismael ‘Mayo’ Zambada, uno de los líderes del cártel de Sinaloa.

De acuerdo con fuentes de la policía federal, Monje Silva confesó la ubicación de una fosa con decenas de cadáveres. Las autoridades federales ubicaron esta fosa en medio de un barrio de clase media ubicado en el norte de esta ciudad de más de 500.000 habitantes.

Los cuerpos estaban entrerrados, algunos a más de siete metros de profundidad, en un lote de 400 m2 usado como depósito de autopartes y apenas protegido por una malla metálica, detrás de una escuela privada de primaria y bachillerato.

Hasta ahora han sido hallados allí 90 cuerpos. Otras cinco fosas fueron encontradas en las semanas siguientes.

La espiral de violencia en el estado de Durango, ubicado en la ruta del narcotráfico que une la costa del Pacífico con la frontera con Estados Unidos e importante productor de marihuana, se disparó en los últimos dos años.

La cifra de asesinatos relacionados con el narcotráfico escaló de 282 en 2008, a 960 el año pasado.