El ministro de Defensa de Colombia, Gabriel Silva, rechazó el miércoles y calificó de “mentira” un informe de Human Rights Watch (HRW), en el que la organización no gubernamental denunció “graves violaciones” a los derechos humanos por grupos “herederos” de paramilitares.

“Es un informe que no se basa en la realidad. No tiene información sino especulaciones, son generalidades que cuando uno las confronta con los hechos nunca son capaces de demostrarlo”, dijo Silva a periodistas.

“Eso es una mentira”, agregó.

Según HRW, en 24 de los 32 departamentos (provincias) de Colombia operan al menos ocho grupos sucesores de las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) que se desmovilizaron entre 2003 y 2006.

Estos grupos serían los principales responsables de “abusos graves y generalizados” contra la población civil, los defensores de derechos humanos y los dirigentes sindicales, según HRW.

El director para las Américas de HRW, José Miguel Vivanco, sostuvo que en los grupos sucesores, que las autoridades colombianas llaman “nuevas bandas criminales”, “casi todos sus líderes eran mandos medios de la AUC que no se desmovilizaron o cometieron fraude con ese proceso”.