El gobierno colombiano se comprometió con brindar mayor seguridad a la comunidad indígena Awá, luego de que doce de sus miembros, 4 de ellos niños, fueron asesinados por desconocidos el 26 de agosto, anunció este miércoles el ministro del Interior y Justicia, Fabio Valencia.

El compromiso del gobierno se logró en una reunión con líderes de esa comunidad indígena y a la que asistió el presidente Álvaro Uribe y representantes de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) destacados en Colombia, indicó el ministro a periodistas.

Tras el asesinato de los doce aborígenes, ocurrido en un resguardo de la etnia Awá localizada en el sur del país, en la frontera con Ecuador, el gobierno colombiano pidió apoyo a la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos para investigar la masacre.

Valencia dijo que además de brindar mayores condiciones de seguridad a esa comunidad indígena, se acordó “la instalación de una mesa especial para evaluar toda la situación del pueblo Awá”.

También se estableció un “plan retorno” de al menos 300 indígenas que huyeron del resguardo tras la masacre, que según las primeras investigaciones de la Fiscalía habría sido cometida por uno de los indígenas dentro de un caso de extorsión. El presunto asesino fue capturado días después.

El gobierno además se comprometió a dar protección a los niños awá que quedaron huérfanos y a entregar tierras a esa comunidad indígena, que habita en el suroeste del país, en la franja fronteriza con Ecuador.

(AFP).