El anticipado fenómeno de marejadas causó estragos la noche de este sábado en la concurrida avenida Perú de Viña del Mar, donde olas de hasta 3 metros de altura llegaron a calle San Martín. Se espera que el fenómeno se intensifique durante la jornada de este domingo.

El fenómeno de marejadas sigue afectando a la zona costera de la región de Valparaíso, provocando estragos en el sector más turístico de Viña del Mar.

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La Gobernación Maritima de Valparaíso informó, que a partir de las 22 horas de este sábado, comenzó aumentar el tamaño de las olas, donde la más grande tuvo una altura aproximada de 5 metros y que la fuerza de la rompiente provocó que el agua ingresara hasta los estacionamientos subterráneos del Casino y de los edificios del sector.

Además, el Gobernador Maritimo de Valparaíso, Rodrigo Vatuonne, informó que este domingo se espera que ocurra una nueva pleamar a eso de las 24 horas.

Auditores de Radio Bío Bío alertaron que la inundación llegó hasta Avenida San Martín, a una cuadra de la cerrada Avenida Perú, ubicada frente a la costa. El fuerte oleaje afectó a transeúntes y automóviles que pasaban por el lugar.

Los comerciantes que normalmente desarrollan su actividad cerca al borde costero, también fueron fuertemene afectados por el fenómeno y advirtieron la pérdida total de sus puestos de trabajo.

Se espera que para este domingo el oleaje sea más intenso, por lo que la Gobernación Maritima seguirá con medidas especiales de seguridad, bandera roja en las playas y monitoreos constabtes del mar.

De seguir en aumento el fenómeno de marejadas, la autoridad maritima no descartó el cierre de los balnearios hasta que este no revista peligro para las personas.

La Dirección Meteorológica dio aviso de lluvias y tormenta eléctrica para la zona central, lo que se concretó en el litoral en horas de la noche, complicando aún más la situación.

En tanto, las recomendaciones de Armada de Chile apuntan a evitar transitar por sectores rocosos y mantenerse en zonas de seguridad en caso de querer presenciar las olas.

Durante la semana, se advirtió sobre la posibilidad de que las fuertes rompientes destruyeran parte de la infraestructura costera, lo que hasta el momento no ha ocurrido, pero da cuenta de la magnitud que podría alcanzar el fenómeno producido por fuertes vientos en alta mar.