José Silva, cuidador que fue atacado por un tigre blanco dentro del zoológico nacional, salió este martes del Hospital del Trabajador. De buen ánimo y preparado para seguir con la terapia de rehabilitación hasta recuperar la movilidad de su hombro derecho, se encuentra luego de haber permanecido internado por más de un mes en el servicio asistencial.

Al momento de su ingreso, Silva presentaba una fractura expuesta en cuatro partes en su hombro derecho, próxima al húmero, con riesgo de perder el brazo. Se efectuaron dos aseos quirúrgicos previos a la cirugía que se le practicó el 8 de agosto.

Erik Cook, jefe del Equipo de Hombro y Artroscopía de Extremidad Superior del Hospital del Trabajador, explicó que “en esa intervención, un equipo de especialistas en extremidad superior pudo armar el extremo proximal y fijarlo con una placa de metal, con el objeto de preservar el stock óseo”.

Posterior a esta operación, el paciente presentó un cuadro infeccioso cuyo origen es propio de las mordeduras de animales, que siempre son contaminantes. “Ese episodio fue tratado mediante un equipo multidisciplinario que incluyó infectólogos y traumatólogos, y la situación fue superada a través de nuevos aseos quirúrgicos”, agregó el profesional.

Durante su tratamiento, José Silva ha sido sometido a varias sesiones de oxigenoterapia en la cámara hiperbárica del Hospital del Trabajador, con el objeto de ayudar en el aceleramiento de regeneración del tejido de las cicatrices post quirúrgicas. Se estima que el proceso de rehabilitación durará alrededor de seis meses.

Por su parte, José Silva dijo encontrarse de buen ánimo y agradecido tanto de sus compañeros, que lo trasladaron de inmediato al hospital, como del personal de urgencia que le brindó la primera atención. Además, manifestó su intención de volver a trabajar cuidando animales, oficio que desempeña desde hace 26 años.