Empresarios mineros reunidos desde el lunes en el sur de Perú propusieron iniciar un proceso de “reconciliación” entre las empresas y comunidades indígenas -opuestas a ellas por motivos ambientales- para facilitar el desarrollo de proyectos mineros.

“Debemos tener una reconciliación que nos permita un nuevo diálogo minero, lo cual signifique concretar el desarrollo de grandes proyectos mineros que en valor representan 42.000 millones de dólares”, dijo Oscar González, presidente de Southern Perú Copper Corporation, de capitales mexicanos.

El empresario inauguró la 30ª Convención Minera Perumin en Arequipa, 1.000 km al sur de Lima, que reúne a las principales mineras que operan en el país y a delegaciones de una veintena de países.

González sostuvo que “el gobierno, las empresas mineras y las comunidades deben unirse para impulsar el desarrollo y evitar los diversos conflictos sociales en el país”.

En los últimos años las mineras se han enfrentado a comunidades indígenas que se oponen a que se instalen en sus territorios debido a los daños al medioambiente, acusándolas de afectar sus tierras y fuentes de agua.

Al acto inaugural asistió el ministro de Comercio Exterior, José Luis Silva, que afirmó que a través de la convención minera “se busca evitar los conflictos sociales y reconocer que la minería permite el desarrollo de cada región”.

La reunión empresarial se desarrolla luego de que a fines de agosto el gobierno de Ollanta Humala, un nacionalista de izquierda, llegó a un acuerdo con las empresas mineras para que paguen un gravamen adicional de unos 1.100 millones de dólares por año durante el próximo quinquenio.

Humala también promulgó el 6 de este mes una ley que obliga a que se consulte a las comunidades indígenas antes de realizar labores extractivas en sus territorios para así evitar conflictos.