A 1.200 se elevan los despidos en las pesqueras de la región del Bío-Bío. Parlamentarios de la zona, junto a los trabajadores del sector, pidieron al Gobierno hacerse cargo del problema por medio de la entrega de una cuota de pesca del jurel.
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Mañana se discute la entrega de la cuota de pesca del jurel por el Consejo Nacional de Pesca, que en primera instancia eligió al norte de Chile como acreedor de dicha captura, empresas en su mayoría en manos del grupo Angelini.
Debido a esta situación, trabajadores pesqueros del Bío-Bío afectados además por más de 1.200 despidos principalmente en Talcahuano y Coronel, piden que la cuota especial se traslade a la zona que mantiene una crisis laboral y deficiencias acrecentadas por el terremoto.
Gaston Saavedra, alcalde de Talcahuano pidió que se detengan los despidos, pues están causando un daño mayor a Talcahuano.
La diputada Clemira Pacheco, hizo un llamado para empezar a discutir la ley de límite máximo de captura con urgencia.
En tanto, Paola Sanhueza, presidenta de la Federación de Sindicatos de Trabajadores de la Industria Pesquera, pidió al empresariado que haga un esfuerzo para las “paliativas” que está dando el Gobierno.
Los diputados Jorge Ulloa, Clemira Pacheco, Sergio Bobadilla y Cristian Campos, llamaron a discutir la Ley de Límite de Captura, que debe ser revisada y mejorada, debido a que redujo costos y maximizó ganancias para los empresarios, pero provocó despidos y precarización del empleo, para los pescadores.
Los despidos tras el terremoto se concentran en las pesqueras Mar Profundo, Camanchaca Coronel, Grimar, Food Coorp, Alimar, El Golfo y Landes que desvincularon a decenas de trabajadores que laboran en las plantas de proceso de la pesca industrial.
