Quizás muchos la han practicado sin saberlo y otros ni siquiera lo han intentado. Lo cierto, según la terapeuta sexual Uchenna Ossai, define el edging como una técnica que permite “lograr el mayor placer posible de un orgasmo. La madre de todos los orgasmos”.
Según señaló Ossai en Redbookmag, este método consiste en retardar el clímax todo lo que puedas para que cuando finalmente llegue se sienta como una verdadera explosión.
“El edging es cuando tú o tu pareja se acercan al orgasmo pero retroceden justo antes de llegar al punto cúlmine; y luego recuperan la energía sexual para acercarse nuevamente. Es una de las muchas maneras drásticas de mejorar el orgasmo y la experiencia del tiempo sexual de una persona”, explicó la especialista.
“Es ir hacia atrás cuando parece que vas a llegar al orgasmo y después volver a aproximarte”, enfatizó.
Ossai señala que esta técnica ayuda a mantener la excitación en un alto nivel durante gran parte del encuentro.
En el caso de los hombres, “aunque baje la erección y te centres más en complacer a tu pareja no te preocupes, casi siempre viene otra justo detrás y el orgasmo será mucho más potente. No sólo aumentará la cantidad de semen, sino que también lo harán las contracciones que se dan con la liberación y producen un océano de placer”, indicó Ossai, señalando que es importante identificar justo el momento previo al clímax y controlarlo.
“Es como negarte a comerte esa galletita hasta el momento en que termines un trabajo, como una recompensa bien merecida. No sólo es algo psicológico, sino también físico. Hay un aumento en el flujo de la sangre hacia el área pélvica cuando se detiene el orgasmo y se continúa la estimulación”, dice en declaraciones recogidas por el diario Clarín.
De hecho, algunos especialistas creen que puede ayudar a hombres con eyaculación precoz. El especialista en salud sexual Michael Reitano, indicó a revista Vice que el edging permite controlar la inevitabilidad eyaculatoria, que “se refiere a ese punto durante el período previo a la eyaculación cuando las contracciones en el conducto deferente y la próstata sacan al semen de los tubos donde generalmente se almacena para luego pasarlo a la uretra. Una vez allí, el proceso eyaculatorio continúa a medida que las contracciones rítmicas de los músculos de la pelvis, aproximadamente cada 0,8 segundos, liberan al semen del pene en oleadas”.
En este sentido, Reitano dice que si logras identificar justo ese momento previo, una vez que lo haces de manera recurrente se convierte en un “tratamiento eficaz para durar más tiempo”.
Aunque en esa explicación se refirió a los hombres, Ossai aclaró que también es bueno para mujeres. “Las mujeres también tienen erecciones del clítoris, por lo tanto el edging funciona tanto en ellos como en ellas. Combinar movimientos lentos y rápidos, circulares (o con un juguete sexual de diferentes velocidades) es la clave”, manifestó.
Por otro lado, la sexóloga Courtney Cleman complementa indicando que “hay un aumento en el flujo de sangre hacia el área pélvica cuando se detiene el orgasmo y se continúa la estimulación. Cuando pensamos en el flujo de sangre, generalmente pensamos en una erección masculina. Pero las mujeres tienen ‘erecciones’ de su órgano del clítoris, y los edging crean una erección más fuerte tanto para hombres como para mujeres”, expresó.
Para poder dominar esta técnica, las expertas recomiendan practicar con la autoestimulación. “Las mujeres pueden sentirse más dispuestas al variar las sensaciones en lugar de caer en un patrón rítmico de movimiento. Si normalmente se masturban con los dedos y prefieren movimientos lentos y rítmicos a lo largo de su clítoris, comience de esa manera, luego mezcle los movimientos más rápidos o circulares alrededor de su clítoris. Experimente a diferentes velocidades o invierta en un juguete sexual que normalmente no captaría su atención o imaginación”, señala.
“Para lograrlo hay que dejarse llevar por el deseo más profundo, deteniéndose e intentando distraerse asumiendo otra tarea antes de volver a la carga”, comenta.
Pero no creas que cuesta manejar la técnica, pues la experta en sexualidad Annabelle Knight dijo a Glamour que en realidad es relativamente fácil. “Se necesita una cantidad de tiempo sorprendentemente corta para dominar el edging, después de unas pocas sesiones cortas en pocos días, la calidad de tu orgasmo mejorará. La mayoría de las mujeres nunca vuelven atrás después de descubrir el edging”, aseguró.
La comunicación es importante
Otra cosa importante de mencionar es que siempre es bueno comentarlo con la pareja antes de ponerlo en práctica. “No quieres confundir a tu pareja y hacer que se pregunten por qué te está llevando más tiempo llegar al orgasmo. Sé abierto acerca del deseo de realizar el edging. Es una práctica sexual muy atractiva que una pareja puede disfrutar junta”, aconsejó Cleman.
“Antes de nada, sé sincero con tu pareja porque puede sorprenderle bastante que no llegues en el momento en el que, se supone, has de hacerlo”, dice Ossai. “Piensa en una luz verde y una roja. Cuando te acercas al orgasmo (la luz roja) deja de hacerlo por completo y deja que la energía sexual se calme un poco antes de comenzar de nuevo (luz verde). Si no quieres ser tan extremo puedes continuar tocando lentamente otras partes del cuerpo, lo que mantiene la energía sexual pero no tan fuerte, listo para volver al campo de batalla”, añade.
