La tintura es una de las prácticas que nunca pasa de moda. Para mantener su color es vital cuidarse el cabello con ciertas recomendaciones.
Cuidarse el cabello para muchos es importante, sobre todo para aquellos que lo tinturan, pues pueden dañarlo en el proceso, dejándolo quebradizo y seco, por lo mismo surge la pregunta sobre cómo lograr mantenerlo fuerte y sano.
Desde 2020 y durante la pandemia, las chilenas y chilenos aumentaron el uso de productos capilares y entre ellos, los que son para tinturarse. Así lo indicaron los datos arrojados en el mismo año, donde las ventas aumentaron en un 17.7%, según la Cámara Cosmética de Chile.
Actualmente el pelo teñido no es una práctica que esté lejos de terminar, ya que año tras año nuevos colores marcan tendencia. Sin embargo, existen ingredientes que deben evitarse con la tintura.
Según lo explica la colorista profesional Richy Kandasamy, en la revista Vogue México, los productos que no colaboran en mantener un cabello sano son “sulfatos (SLS O SLES), parabenos, cloruro de sodio y productos petroquímicos”, los cuales se indican en la etiqueta de los productos capilares.
Consejos para cuidar un cabello teñido
Los especialistas, de la revista Vogue México, señalan que lo primordial es usar un champú nutritivo indicado para tratar cabellos teñidos.
La colorista Natalie Rotger recomienda esperar un tiempo prudente entre decoloraciones, “esperar de seis a ocho semanas”.
Sumado a ello, aplicar en el cabello mascarillas, no abusar de las herramientas de calor y a eso añadir protectores térmicos específicos para tipos de cabello.
“No lavar el cabello a diario e intentar dar el mayor tiempo posible entre lavados para dar un respiro al cuero cabelludo y permitir que los aceites naturales se produzcan.
Las puntas son el cabello más frágil y débil, así que se debe proteger siempre con una crema hidratante/suero/aceite nutritivo”, consigna la revista Vogue México.
Por último, sumado al cuidado con productos capilares se debe considerar una dieta reforzada en vitaminas, minerales y el consumo de agua, los cuales complementan el cuidado y fortalecen el cuero cabelludo.
