Una funeraria de Singapur adoptó un proceso distinto de cremación que ocupa agua para incinerar el cuerpo de las mascotas. Según explicaron los familiares, el proceso resulta "menos impersonal" que una cremación normal, pues permite despedirse de la mascota.

Cuando mueren las mascotas, como perros y gatos, es un momento que puede generar mucho dolor y pena. Así, como son seres sintientes, surge la necesidad de despedirlos de manera cercana. Por esto cuando surge el imprevisto de realizar una cremación, los dueños ahora pueden optar a la “acuamación”.

Esta instancia, en lugar de usar la incineración, ocupa agua para acelerar la descomposición del cuerpo del animal usando la hidrólisis alcalina.

¿Cómo funciona la acuamación en perros y gatos?

Por lo mismo, a través de una mezcla con hidróxido de potasio y agua a temperatura elevada (unos 150 grados), el animal es metido en una cámara metálica entre 20 y 24 horas, para que solo queden los huesos al final del proceso.

De acuerdo con el testimonio de Kalavathi, y su abuela, Leichumy, el método produce paz a los familiares, puesto que la incineración es “fugaz e impersonal”, consigna la Agencia EFE.

En cambio, la acuamación ofrece un proceso que genera menos estrés en las personas que despiden a sus perros y gatos, a quienes consideran como un integrante más de la familia.

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“A mucha gente no le gusta la idea del fuego, es deprimente. Hemos tenido ya como 40 clientes, y organizamos también un pequeño funeral para ellos”, cuenta a EFE Yang Loo, quien fundó “La Funeraria Verde”, el único establecimiento que funciona en Singapur bajo este nuevo concepto.

Después, Loo se encarga de pulverizar los huesos, lo que se demora uno o dos días, de modo que quedan convertidos en cenizas, al igual que en la combustión.

“La gente está muy receptiva”, afirma el joven, quien asegura que cobra cerca de $637.000 pesos, dependiendo del tamaño del animal.

Sin embargo, el encargado de la funeraria sostiene que “el siguiente paso son los humanos. No hay espacio en Singapur, y las cremaciones no son sostenibles”, aseguró.

Por otro parte, en Chile este servicio aún no se ofrece, porque en Internet solamente hay ofertas de servicios convencionales de cremación, que puede llegar a $300.000 con ánfora a elección y la entrega de una placa personalizada, entre otras prestaciones.