Hace unos días se dio a conocer la historia de Paul Farthing, un ex veterano de guerra que mantenía un refugio para personas y animales en Kabul, Afganistán, a cargo de una ONG que él mismo fundó luego de retirarse como soldado de Reino Unido.

Luego de la toma por parte de los talibanes al país, Farthing pidió ayuda y asilo a su país natal para ayudar a los afganos a escapar, pero su intención también era llevarse a sus 140 perros y 60 gatos que cuidaba y alimentaba en dicho recinto.

No obstante, recibió negativas por parte de las autoridades quienes accedieron a ayudar a las personas que estaba padeciendo bajo el poder talibán, pero no recibirían a los animales. Ante esta respuesta, el hombre conocido como “Pen”, se rehusó a dejar el país pese a los peligros y así no abandonar a sus perros rescatados.

Paul Farthing | Twitter

Su historia dio la vuelta al mundo y a través de redes sociales muchos manifestaron admiración por “Pen” y su entrega para con sus animales.

Sin embargo, la historia dio un vuelco cuando Reino Unido manifestó que prestaría ayuda para que Farthing pudiera regresar al país junto a sus animales. Según la agencia de noticias AFP, “el ministro británico de Defensa, Ben Wallace, anunció este miércoles que autorizará la evacuación aérea de Kabul de perros y gatos sacados de un refugio por un exmarine, que fletó un avión para evacuar al personal afgano y a los animales”.

Fue así, que el gobierno británico decidió otorgar un visado a todo el personal de la asociación Nowzad (ONG de “Pen”) y a sus familias, unas 68 personas en total.

La historia de “Pen”

Paul Farthing llegó a Afganistán en el año 2006 en una misión de paz. Luego de cumplir sus labores, conoció y salvó a un perro a quien le puso por nombre Nowzard, la ciudad en la cual habría encontrado al can y el título que le otorgó a su organización.

Twitter

Tiempo después, debía volver a su país ya terminada su misión, por lo que estaba preparado para emprender el viaje de regreso junto a su amigo. Sin embargo, decidió cambiar de idea y asentarse en Afganistar para fundar y construir una ONG y refugio para animales y personas que lo necesitaran, detalla el medio The Guardian.

Hasta antes de la llega a de los talibanes a la región afgana, Nowzard rescató, ayudó y rehabilitó alrededor de 1600 perros y gatos, a los cuales se les buscó familia y fueron dados en adopción.