El agua es vida, refrán popular que en esta época de escasez se hace aún más evidente, sobre todo para una industria crucial para la salud humana como lo es la farmacéutica, que también requiere de este vital elemento para la generación de medicamentos.

Afortunadamente los laboratorios productores en Chile han sido históricamente cuidadosos con la utilización del agua, ciñéndose a planes de manejo y consumo eficiente de este recurso con el fin de alcanzar el equilibrio hídrico de su producción nacional, lo que finalmente beneficia al país con una oferta de medicamentos genéricos de calidad y a precios competitivos.

Dentro de este manejo se encuentra la gestión de las aguas residuales, ya que la ley chilena cataloga a los residuos farmacéuticos como peligrosos y el Estado monitorea estrictamente el manejo de estos desechos farmacéuticos.

Sin embargo, por el momento quedan fuera de la ley todos los residuos farmacéuticos que se generan en los hogares, por lo que nuestro desafío ahora es colaborar con el Estado y la ciudadanía para incentivar su acopio y correcta disposición para evitar que esos residuos terminen en vertederos y ríos.

Elmer Torres, vicepresidente de la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos, Asilfa.

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