El agresor habría roto ventanas y una puerta del bus que manejaba, atacándolo con puños y un arma blanca. Además, lo habría insultado en razón de su identidad y expresión de género.

Un chofer transgénero de 32 años del sistema de transporte público, I.A.U.C., denunció una agresión en razón de su expresión de género en Peñaolén. Ello por parte del conductor de un vehículo, con quien previamente habría tenido un conflicto de tránsito.

La víctima precisó que si bien el problema partió por faltas a la ley de tránsito del agresor, una vez que este se acercó al bus y notó que el chofer tenía una expresión de género diversa, comenzó a insultarlo, por ello, incrementado su odiosidad hasta dejarlo con distintas lesiones en su cuerpo.

Según indicó el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), los hechos ocurrieron a eso de las 18:00 horas del pasado 11 de noviembre en Américo Vespucio con Rotonda de Quilín, comuna de Peñalolén.

“Me encontraba haciendo el servicio, dejando y tomando pasajeros en la parada de la rotonda. Al tomar la pista de circulación apareció un auto particular con 4 hombres y una mujer quienes querían adelantarme. Si bien los dejé pasar y me adelantaron, comenzaron a frenar en repetidas ocasiones. Los pasajeros del bus se percataron de esto”, contó el chofer.

Añadió que al detenerse en un paso peatonal, “quedé en un punto ciego. Volví a detenerme y el automóvil se cruzó, descendiendo del mismo un tipo. Se acercó a la ventana, y al notar mi expresión de género se puso más violento. Comenzó a tirar puntazos en la ventana con su arma blanca, mientras me gritaba “maricona culiá te voy a matar””(Sic).

“Como no abrí las puertas, el sujeto comenzó a romper la puerta trasera del bus. Subió y se pasó a la cabina donde me encontraba. Mientras me seguía insultando por mi expresión de género, me hirió con golpes de puño y arma blanca. Recibí más de 40 combos y perdí la conciencia”, continuó.

En el informe médico de lesiones de la Mutual de Seguridad se constató “fractura de huesos nasales, herida cortante con arma blanca en la mejilla derecha y contusión de cara”.

Junto con solidarizar con el afectado, la vocera del Movilh, Javiera Zúñiga, señaló que “este brutal ataque demuestra lamentablemente una realidad muy común. Frente a cualquier tipo de conflicto, cuando los agresores se percatan de la orientación sexual, identidad o expresión de género de las víctimas, exacerban su virulencia, y dan paso a agresiones tanto físicas, como verbales de tipo homo/transfóbico”.

Añadió que “tristemente nuestra legislación no considera a este tipo de abusos como agravante. La ley Zamudio solo habla de delitos originados por discriminación. Pero en este caso la discriminación se expresó después de otro conflicto”.