Cientos de parejas han colgado una serie de candados en las barandas de los puentes Pío Nono y Racamalac de Providencia, simulando lo que ocurre en varias ciudades en Europa con estos denominados “candados del amor”. Sin embargo, el municipio ordenó retirarlos luego que fueran catalogados como “peligrosos”.
Un informe técnico de la empresa de ingeniería Cazaux y Guzmán -solicitado por el municipio de Providencia- determinó que los cientos de candados que la gente ha colgado en las barandas de ambos son un riesgo para las personas, ya que su peso ha provocado el debilitamiento progresivo de estas estructuras.
“Para la cantidad actual de candados presente en la baranda ésta deja de presentar las condiciones mínimas de seguridad para los transeúntes del sector, por lo que se debe efectuar una correcta mantención de estos elementos (esto es) el retiro de candados y elementos adheridos a la estructura”, se mencionó en dicho informe.
El documento aseguró que ya se observa una deformación en las barandas que excede el peso máximo permitido. De esta manera, recomendaron el retiro de candados y elementos adheridos a la estructura junto con la verificación de corrosión en elementos y conexiones.
Paulina Lobos, administradora municipal, indicó que “los candados adosados a las barandas llegan casi a la tonelada de peso, deformando la estructura y excediendo el peso máximo permitido. Esto es preocupante, ya que puede significar un accidente de gravedad o incluso la muerte, en caso de que una persona se apoye en la estructura”.
Las obras de mantención comenzaron el martes 21 de abril y hasta ahora se han retirado más de 1.000 candados solo del puente Pío Nono. Además, se realizará una mantención de las barandas para eliminar cualquier factor que pueda ser un peligro para las personas.
