El gobierno, en voz del ministro de Transportes, Andrés Gómez-Lobo, descartó de forma contundente la posibilidad de implementar la propuesta de un Transantiago con “tarifa 0”.

La idea, realizada por el académico Juan Carlos Muñoz y apoyada por parlamentarios como Giorgio Jackson, establece que el Estado, los trabajadores y los empleadores financien el sistema. Para esto, a cada persona se le debería descontar cerca de $11 mil de su sueldo cada mes.

La autoridad declaró esta jornada que “no creo que sea ni factible ni sea algo que deberíamos introducir”, ya que sería injusto para los trabajadores formales, ya que el Transantiago sería utilizado por toda la población.

“Si financiamos el sistema con impuestos a la planilla de sueldos, eso al final perjudica a los trabajadores formales. Ellos estarían pagando por los trabajadores a cuenta propia, por ejemplo, que no estarían pagando a través de la planilla; o trabajadores informales u otras personas que no trabajan. Sería injusto para los trabajadores que tuvieran que pagar por todos los otros”, señaló en un punto de prensa.

Gómez-Lobo también señaló que la propuesta “no es muy factible en el sentido de que en Chile no existe una estructura tributaria por ciudad. Si uno introduce un impuesto al trabajo tendría que aplicarse en todo el país. No creo que sea justo que trabajadores de otras ciudades estén financiando el sistema de transporte público en Santiago”.

“También hay ciertos problemas técnicos, respecto a que eliminaría los incentivos a los operadores de parar en paraderos y preocuparse de la calidad del servicio. Si la tarifa es cero, no se le puede pagar a los operadores por la cantidad de pasajeros que lleva”, agregó.

Por ende, el ministro cerró su opinión respecto al tema que “consideramos que, si bien entendemos la motivación que es muy legítima, no es ni factible ni muy conveniente introducir un sistema como el planteado“.