En Talca, un adolescente de 17 años sumó, este domingo, la detención número 40 a su hoja de vida. Y aunque parezca imposible, quedó -nuevamente- en libertad.

El joven ya es conocido en Tribunales, ya que el jueves 17 de agosto fue su penúltima detención por robar una joyería. Y este domingo efectuó un robo con fuerza en el local de abarrotes “Don Mateo”, cercano al terminal de buses.

El delito efectuado por el joven no está sancionado con pena de crimen, vale decir, con más de 5 años y 1 día de cárcel. La actual ley de responsabilidad penal adolescente impide que se decrete una reclusión provisoria.

Ello explicaría lo ocurrido en los últimos delitos, como el de la joyería, cuando el mismo menor fue llevado al Juzgado de Garantía de Talca, por robo en lugar no habitado.

Cámaras de seguridad revelaron que el menor efectuó el saqueo junto a otro adolescente de 17 años. Forzaron la cortina del local comercial y rompieron las vitrinas. Sustrajeron diversas especies: aros, cadenas y anillos de plata, avaluados en 1 millón 400 mil pesos.

Impotencia ante la ley

Luego de la detención de la joyería, ambos jóvenes quedaron en libertad, pero citados a juicio abreviado para el 26 de septiembre.

La Fiscalía afirmó que pedirá una sanción de 540 días de libertad asistida simple. Además, los adolescentes quedaron con arraigo nacional y sujetos a una entidad colaboradora del Sename.

Indignación, impotencia e incredulidad. Y también, aunque resulte incomprensible, con un poco de humor, recibí la decisión del tribunal de dejar nuevamente a este menor en libertad”, afirmó Darwin Sobarzo, dueño del penúltimo local asaltado.

El dueño de la joyería robada, confesó que se siente vulnerable. “Mientras estábamos limpiando los vidrios por el robo, estos sujetos pasaron por el frente de mi local, muertos de la risa“.

“Cuesta entender, más allá de la debilidad de la ley, que los ciudadanos podemos estar tan desamparados ante la acción delictual“, agregó Sobarzo.