Una vez cumplido el plazo de casi siete meses para la desocupación voluntaria, la delegada presidencial del Bío Bío, Daniela Dresdner , aseguró que acatarán la orden de desalojo por la fuerza instruida por el Poder Judicial para las tomas de Hualpén y Arauco.

La Delegación Presidencial del Bío Bío adelantó que cumplirá lo que ordenen los tribunales respecto de las tomas de terreno, particularmente de las que existen en Arauco y Hualpén.

En esos caso, la Justicia autorizó el desalojo, aunque previo a un plazo para la salida voluntaria de los ocupantes ilegales.

Sin cuestionar que las últimas sentencias de la Corte Suprema y la Corte de Apelaciones de Concepción puedan estar interviniendo en políticas públicas que corresponde al Poder Ejecutivo, la Delegación Presidencial dijo que acatarán esas resoluciones por la usurpación de terrenos en Arauco y en el Santuario de la Naturaleza de Hualpén.

En esos fallos, al acoger sendos recursos de protección, la justicia dio un plazo de seis meses y 30 días para que las familias en toma abandonen de forma voluntaria el paño, en caso contrario, darán luz verde para el desalojo por la fuerza, pero condicionado a que se dé un albergue a las personas.

Al respecto, la delegada Daniela Dresdner , dijo que una vez agotadas los recursos y las resoluciones sean definitivas, cumplirán lo ordenado por el Poder Judicial.

La reacción de la Municipalidad de Hualpén, en tanto, vino desde el Concejo, destacando la edil Romina Medina, que la Corte de Apelaciones se haga cargo del daño ambiental al humedal de Lenga y al mismo tiempo de las familias en toma, quienes -dijo- serán asistidas por el municipio.

En igual sentido se manifestó el concejal Miguel Ángel Aravena, aunque llamando a las personas que ocupan el lugar a salir voluntariamente y no esperar el desalojo por la fuerza.

Hasta ahora el alcalde Miguel Rivera no se ha pronunciado sobre el dictamen, a pesar de que lo mandata directamente a coordinar con los ministerios del Interior, de Vivienda y Desarrollo Social el traslado a un albergue de las personas en toma.