La Corte Suprema condenó al Estado al pago de más de mil 600 millones de pesos por la muerte de 18 militares el año 2006 en el puente Quelén Quelén.

El máximo tribunal revocó el fallo de la Corte de Apelaciones que había rechazado la demanda. Además, confirmó la falta de servicio del MOP a raíz de la mala señalética y la deficiente mantención del viaducto.

Fue en noviembre de 2006 cuando el bus que transportaba a la Banda Instrumental del Regimiento Chacabuco desbarrancó. Esto, en el puente Quelén Quelén, ubicado a siete kilómetros al norte de Cañete, cayendo al río Tucapel.

Tras 15 años finalmente hay una sentencia en la demanda presentada por los familiares de los 18 militares que murieron ahogados.

La Corte Suprema determinó la responsabilidad del Estado y por eso la indemnización como reparación del daño moral sufrido.

“Cerrar un círculo”

El abogado José Luis Diez destacó el fallo que revocó la resolución de la Corte de Apelaciones de Concepción.

El Segundo Juzgado Civil acogió la demanda al determinar que el accidente se causó por las débiles barreras de contención del puente.

A esto se sumó lo mismo la señalética que permitía una velocidad no acorde a las condiciones del camino.

Esa falta de servicio fue reconocida por la Corte Suprema, como lo explicó el abogado Mario Rojas, quien representó a la familia del chofer del bus, propiedad de empresas Hualpén.

Para Miriam Contreras, viuda del sargento Manuel Bustamante y quien al momento de perder a su pareja tenía siete meses de embarazo, el fallo permitirá cerrar el círculo, aunque -dijo- no devolverá a su hija su padre.

El Consejo de Defensa del Estado insistió sin éxito en la supuesta imprudencia del conductor del bus.

La Corte Suprema desechó ese argumento y culpó a Obras Públicas por la falta de servicio como detonante del trágico accidente.